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Comentarios
Buenas, Amador. Estoy leyendo el libro cuando me deja la vida. Me parece que tiene líneas muy sugerentes. Es curioso, porque la idea de revolución a la que apuntas me parece más cercana a algunos pasajes del Evangelio (por ejemplo, Mc 4,26-34) que al mundo del paganismo. Lo digo por esa idea en el libro sobre la necesidad de un imaginario pagano. Creo que estamos más cerca de la novedad del Espíritu que de una simple traducción del panteón con algunos detalles diferentes. Por otro lado, simplemente recordar que el profeta, al menos en la Biblia no es el que tiene la capacidad de adivinar el futuro, sino de leer lo que Dios está pidiendo en este momento. Dicho en lenguaje del Vaticano II, el que es capaz de leer "los signos de los tiempos". Creo que esta idea del profetismo nos ayuda a no teñirla de esoterismos y magias. Muchas gracias por tu reflexión. Un saludo, Carlos