Ruta el culebre en San Vicente de la Barquera

Hola bienvenidos a una nueva edición del canal de pocas de turismo cantabria hoy ya inmersos en el otoño y mirando ganancias a navidad queremos proponer es una ruta perfecta para disfrutar el verde de nuestro esperados y el azul de nuestro mal ya que esta ruta transcurre los acantilados de sant vicent de barquero además viene con la leyenda incluida la queréis conocer estáis preparados para ponerlos las botas lanzados al monte y caminar en uno de los internos más bellos de nuestra costa pues vamos allá para los mas despistados comenzaremos por el principio por hablarnos de la localidad protagonista de este podcast la hermosa villa marinera de san vicente de la marca mundialmente conocida por su extraordinaria belleza por esa imagen que traspasa fronteras de la costa su puente y los magníficos picos de europa de fondo por ser el único punto por el que pasan dos caminos de peregrinación el evangelio y el de santiago por sus magníficas playas para tener sur por su extraordinaria gastronomía y como no por nuestro querido david bustamante oriundo de esta villa y posiblemente sus mejor envasado como se acabamos de comentar por san vicente pasa el camino de santiago y este apóstol será protagonista de nuestra leyenda de hoy pero volvamos a la ruta meramente dicha que ya estábamos con las botas puestas verdad pues bien la ruta recorre la parte norte de la villa marinera y en su paso las imponentes paisajes de acantilado salvajes nos harán sentir la naturaleza en todo su esplendor es un camino donde la tranquilidad la soledad y la contemplación del mar con todos los sentidos hacen que se convierta en un recuerdo perdurable esto ocurre especialmente en el primer tramo ya que no es de esos lugares terriblemente transitados quizá por no ser demasiado conocido al menos hasta la publicación de este podcast esta ruta circular de unos diez kilómetros y tres horas de duración puede hacerse en el sentido que cada uno quiera eso si tenéis que para disfrutar y fotografiar algunos puntos concretos del camino como el faro de san vicente la playa de la niñera los llanos el fraile y por último y no por eso menos importante sus múltiples cuevas este camino está plagado como en muchos puntos de la costa cantábrica de cavidades en sus acantilados pero vamos a ponernos en la que da nombre a nuestro pocas de la cueva del culebra más que una cueva se trata de un pequeño hundimiento con una estrecha abertura al final y una marca en la roca con forma de herradura queda explicación a la leyenda que os vamos a contar en cantabria muchas de las cuevas que albergan las peñas y acantilados según contaba la tradición oral leyenda estaban habitadas por una especie de monstruos mitad dragón y mitad serpiente que se denominaban culebrones por lo general su labor era guardar tesoros de los que escondieron los muros es difícil verlos pues salen poco y nadie se atreve a internarse en sus guarenas pero según la tradición oral de la zona se han podido ver el de secadora que era tan grande que se comía vacas enteras el de la cueva de matienso reptil también gigantesco y el de la cueva de maldición una enorme serpiente con alas que lanza unos silbidos agudiza de entre los más conocidos por la tradición está el que mató el apóstol santiago en la cueva en la que nos hemos parado que sigue llamándose cueva del culebra según la leyenda se trataba de un extraño reptil comparable a un dragón con cabeza ancha potentes mandíbulas armadas de colmillos cresta espinosa que se prolongaba por todo el espinoza hasta la cola patas con garras de acero y a las de murciélago cuando respiraba ex álava un tremendo aliento y dicen que con un coletazo derribada a un caballo los habitantes de la zona se habían comprometido a entregar en cada año una doncella a cambio de que les ocasionada menores mal porque cuando le daba por salir de su guarida destrozaban sembrados en cuya rebaños y devoraba todo al que se le ponía por delante para calmarlo y tener la fiesta en paz se elegía una vez al año a una joven por sorteo se le atado a un poste fuera de la cueva para impedir que o se desplomaron cuando el nuestro aparecía este salía lanzando feroces rápidos que hacían retumbar las rocas y la demoraba lentamente aquel horroroso espectáculo lo contemplaba todo el pueblo que así podía juzgar el valor del sacrificio y lo cara que costaba la seguridad del pueblo en una ocasión la víctima era una muchacha que ya había asistido dos veces a aquel monstruoso martirio y las dos veces se había desmayado en los brazos de su madre