Has elegido rechazar las cookies basadas en consentimiento que utilizamos principalmente para gestionar la publicidad. En adelante, para acceder a nuestra web tienes que elegir alguna de las siguientes opciones.
Premium
3,99 €/mes o 39,90 €/año
Sin publicidad y mucho más
Plus
Por 9,99 €/mes
Contenido exclusivo y sin publicidad
Si has cambiado de idea, puedes aceptar las cookies y continuar usando iVoox de forma gratuita.
Con tu consentimiento, nosotros y nuestros 813 socios usamos cookies o tecnologías similares para almacenar, acceder y procesar datos personales, como tus visitas a esta página web, las direcciones IP y los identificadores de cookies. Algunos socios no te piden consentimiento para procesar tus datos y se amparan en su legítimo interés comercial. Puedes retirar tu consentimiento u oponerte al procesamiento de datos según el interés legítimo en cualquier momento haciendo clic en ''Obtener más información'' o en la política de privacidad de esta página web.
Nosotros y nuestros socios hacemos el siguiente tratamiento de datos:
Almacenamiento y acceso a información de geolocalización con propósitos de publicidad dirigida, Almacenamiento y acceso a información de geolocalización para realizar estudios de mercado, Almacenar la información en un dispositivo y/o acceder a ella , Datos de localización geográfica precisa e identificación mediante análisis de dispositivos , Publicidad y contenido personalizados, medición de publicidad y contenido, investigación de audiencia y desarrollo de servicios , Uso de cookies técnicas o de preferencias.
Comentarios
Podriais hacer un debate con un científico. Cada uno que exponga sus argumentos, y como dicen, que gane el mejor. Contrastar argumentos, y no solo una charla de pensamiento único. Os propongo uno: Fernando Valladares.
Sólo faltó citar una simple secuencia climática de la Edad Media o la Moderna para darnos cuenta que las oscilaciones del clima son tan imprevisibles e incontrolables como la actividad de los volcanes. Y no, no era por la acción humana tal y como nos la presentan.
En realidad, más que establecer el debate entre “calentólogos” (los que defienden el cambio climático) y “negacionistas” (los que lo niegan), creo que es más correcto y científico hablar de los que opinan que ese cambio posible, hacia un calentamiento o un enfriamiento global, que no conozco a nadie que dude de que se puediera estar produciendo, sin que se pueda afirmar rotundamente por falta de perspectiva temporal. Muchos comunicadores, además, confunden sistematicamente clima con tiempo. Creo que el problema real, y que tiene consecuencias políticas, es si esos presuntos cambios climáticos tienen su origen más importante en la acción humana y no creados mayormente por fenómenos naturales o siderales, como las tormentas solares o las emisiones volcánicas, por poner sólo dos ejemplos. Pero hay otro asunto que confunde a los no expertos: confundir cambio climático con contaminación ambiental.